domingo, 20 de mayo de 2012
Como la palmera y el cedro...
El Salmo 92:12 dice: "El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano".
Este versículo es del todo especial para mí, ya que me enseña la gran necesidad y dependencia que tengo de mi Dios en mi caminar con él. Primero, me dice que el "justo", ¿justo? ¿habrá alguno de nosotros que se considere justo por sí mismo? La Biblia señala que no hay justo ni siquiera uno...solo Dios. Si aquí el Salmo señala "el justo", nos está presentando claramente la infinita gracia de Dios, al enviar a Jesús a morir por la humanidad y a través de su sacrificio e intercesión por nosotros nos presente como justos ante su Padre. En segundo lugar, menciona que los justos CRECERÁN como la PALMERA....para que la palmera pueda crecer hay una característica fundamental, y es que sus raíces comienzan a buscar un elemento vital por debajo de la corteza terrestre, se desplazan hasta que logran encontrar agua. Esta acción de las raíces permite que la palmera de forma natural comience a CRECER. En tercer lugar se menciona otro árbol, este es el CEDRO, un árbol que aparentemente es fácil de derribar, pero demuestra en los momentos de calamidades, lluvias y tormentas....mientras que todos a su alrededor caen, este árbol permance firme y ¿saben por qué? Porque sus raíces debajo de la corteza de la tierra comienza a buscar las rocas y comienzan a aferrarse a la roca y es por eso que pese a las contrariedades que pueda enfrentar permanece firme.
Podemos concluir entonces, que tu y yo somos justos por la gracia de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Además, que si yo como cristiano anhelo crecer en mi caminar con Dios, entonces debo buscar día a día el AGUA DE VIDA que es Jesús (San Juan 7:37-39) por medio del estudio de su Palabra y la oración. De esta forma, y teniendo esta experiencia diaria con nuestro amado Jesús nos mantendremos firmes ante las pruebas y las dificultades que nos golpean en nuestro quehacer cotidiano. "Él es la Roca" (Deuteronomio 32:4) Debemos edificar en la Roca que es Cristo, aferrarnos a Él ante las dificultades, será el secreto para mantenernos firmes en las tormentas. Un abrazo fraternal, Dios les bendiga.
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Amen. Reciban muchas bendiciones. un saludo fraternal desde mi blog www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com
ResponderEliminarExelente enseñanza. Muchas Bendiciones
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