¿Qué ves en esta imagen?
Optimista...según el diccionario de la real academia española es aquel que propende a ver y juzgar las cosas en su aspecto más favorable.
Quiero contarles que últimamente he estado con muchos pensamientos de pesimismo, como cansado de todo ¿te ha pasado? Bueno, últimamente me había estado sintiendo de esa manera, por diversas situaciones que uno encuentra injustas muchas veces y la realidad del día a día, todo tan acelerado que pocas veces nos dejan un espacio en el tiempo que sea de valor, para dedicarnos a las cosas que realmente son importantes...generalmente cuando me sumerjo en las actividades rutinarias y dejo poco tiempo para lo trascendental que es mi comunión con mi Dios, el dedicar tiempo valioso a mis cercanos me cuestiono muchas cosas como en que si lo que hago realmente tiene algun sentido, sobre todo en los tiempos de la historia que estamos viviendo...lucho día a día para no descuidar mi culto personal, para no dejar de lado la oración y estudio de la Biblia, ya que considero que son muy importantes en mi caminar con Dios y en esa lucha el Señor me regaló desde temprano esta palabra, OPTIMISMO, ¿será que nos está faltando esta palabra en nuestro caminar a diario? ¿será que nos estamos olvidando que somos HIJOS del GRAN DIOS DEL UNIVERSO? ¿Y qué esto debería generar un gran impacto en nuestra vida?
Bueno hoy descubrí después de todo que no he estado siendo pesimista, que el reconocer que estoy cansado (es solo transitorio, momentáneo) estoy diciendo Señor yo soy débil NECESITO de tu poder, de tu fuerza para continuar, solo no puedo!!!
Optimista es aprender a ver las cosas en su aspecto favorable....siempre Dios tiene un propósito, un plan....CONFIEMOS EN ÉL.
martes, 22 de mayo de 2012
lunes, 21 de mayo de 2012
En Jesús hay poder real.
domingo, 20 de mayo de 2012
Como la palmera y el cedro...
El Salmo 92:12 dice: "El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano".
Este versículo es del todo especial para mí, ya que me enseña la gran necesidad y dependencia que tengo de mi Dios en mi caminar con él. Primero, me dice que el "justo", ¿justo? ¿habrá alguno de nosotros que se considere justo por sí mismo? La Biblia señala que no hay justo ni siquiera uno...solo Dios. Si aquí el Salmo señala "el justo", nos está presentando claramente la infinita gracia de Dios, al enviar a Jesús a morir por la humanidad y a través de su sacrificio e intercesión por nosotros nos presente como justos ante su Padre. En segundo lugar, menciona que los justos CRECERÁN como la PALMERA....para que la palmera pueda crecer hay una característica fundamental, y es que sus raíces comienzan a buscar un elemento vital por debajo de la corteza terrestre, se desplazan hasta que logran encontrar agua. Esta acción de las raíces permite que la palmera de forma natural comience a CRECER. En tercer lugar se menciona otro árbol, este es el CEDRO, un árbol que aparentemente es fácil de derribar, pero demuestra en los momentos de calamidades, lluvias y tormentas....mientras que todos a su alrededor caen, este árbol permance firme y ¿saben por qué? Porque sus raíces debajo de la corteza de la tierra comienza a buscar las rocas y comienzan a aferrarse a la roca y es por eso que pese a las contrariedades que pueda enfrentar permanece firme.
Podemos concluir entonces, que tu y yo somos justos por la gracia de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. Además, que si yo como cristiano anhelo crecer en mi caminar con Dios, entonces debo buscar día a día el AGUA DE VIDA que es Jesús (San Juan 7:37-39) por medio del estudio de su Palabra y la oración. De esta forma, y teniendo esta experiencia diaria con nuestro amado Jesús nos mantendremos firmes ante las pruebas y las dificultades que nos golpean en nuestro quehacer cotidiano. "Él es la Roca" (Deuteronomio 32:4) Debemos edificar en la Roca que es Cristo, aferrarnos a Él ante las dificultades, será el secreto para mantenernos firmes en las tormentas. Un abrazo fraternal, Dios les bendiga.
sábado, 19 de mayo de 2012
Mi vida con Jesús
A través de este blog quiero compartir mi experiencia, mi caminar, mis caídas y levantadas al vivir con, por y para mi Salvador Jesús. Te invito, para que día a día compartamos experiencias y nos animemos en el Señor, mientras avanzamos y esperamos la promesa maravillosa del retorno inminente de Jesús. San Juan 14:1-3.
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